Fanegas, celemines y varas… así medían nuestros abuelos

Por Irreductible, el 10 mayo, 2009. Categoría(s): curiosidades de la historia • historia • miscelanea

Al contrario de lo que muchos puedan pensar, muchas veces cuando escucho la palabra arroba, no viene a mi mente ningún concepto tecnológico o informático. En su lugar, curiosamente, me acuerdo de mi abuelo… me acuerdo de los olivos en Ciudad Real o del aceite de Jaén…

Lejos de la manía actual de medirlo todo en campos de fútbol, hace no tantos años, nuestros abuelos tenían un asombroso abanico de posibilidades para expresar cantidades, extensiones y volúmenes… Una diversidad increíblemente rica que hoy en día ya hemos perdido…

Imagen | Licencia Creative Commons | Fuente: Flickr

Palabras y términos como arrobas, celemines, fanegas o cuartillas se están dispersando en la bruma de los nuevos tiempos y han quedado olvidadas o sustituidas por absurdas medidas deportivas…

También es cierto que no tiene mucho sentido rescatarlas para utilizarlas hoy en día, en estos tiempos de globalización y búsqueda de la homogeneidad… pero, sí me parece interesante recordar esa riqueza histórica que hunde sus raíces en antiguas costumbres y tradiciones.

Además nos puede servir para hacernos una idea aproximada para cuando volvamos al pueblo y charlemos con los ancianos del lugar… y nos digan aquello de «pues allí, en la loma del pinar, tenía seis fanegas de olivos bien bonicos»…

Para empezar hay que hacer especial hincapié en el dato de su diversidad: Cada comarca, cada comunidad… casi cada pueblo… tiene sus propias medidas y variarán dependiendo del lugar donde te encuentres.

Además, curiosamente, muchas de estas medidas hacen referencia indistintamente a extensiones, masas o volúmenes, y es el contexto el que nos ayuda a diferenciar si hablamos de área o de capacidad…

LA ARROBA

El término arroba proviene del árabe (ar-rub) y significa «la cuarta parte«, en este caso sería la cuarta parte de un Quintal, y se utiliza tanto para expresar masa como volumen.

Seguro que en alguna ocasión habréis escuchado la expresión: «¡Esto pesa una arroba!», pues bien… Una arroba pesa unas 25 libras, es decir… algo más de 11 kilos (11,33). Aunque además, hay que recordar que una arroba también puede expresar volumen, y en este caso hay que diferenciar si estamos hablando de aceite o de vino…

Para entendernos: una arroba de aceite serían unos 12 litros y medio (12,563 litros), mientras que una arroba de vino serían un poco más de 16 litros (16, 133 litros).

LA FANEGA

Al igual que la arroba, la fanega sirve para medir extensiones de tierra y también volumen… Además, y para hacer más rico el concepto (o más complicado), la fanega depende también del lugar en el que te encuentres… No es lo mismo una fanega en Castilla que en Andalucía.

Generalizando y tomando como más extendida la utilizada en Castilla, podemos decir que la Fanega equivale a 55 litros y medio.

Contenedor de Media Fanega para medir grano, Cuenca | Fuente: Wikipedia | Creative Commons

Cuando la fanega expresa una extensión de terreno equivale a aproximadamente unos 6.459 metros cuadrados, aunque también varía dependiendo de las comarcas y comunidades.

Además, la Fanega se puede dividir en: 2 almudes, o 12 celemines, o 2 cuartos, o en 4 cuartillas

EL CELEMÍN

Corresponde a una doceava parte de Fanega y también sirve para medir extensiones o volúmenes.

Si se trata de capacidad, el celemín se utilizaba frecuentemente para medir trigo y equivalía a algo más de 4,6 litros. En el caso de usarse para medir extensiones de tierra, el celemín eran unos 537 metros cuadrados.

Haciendo memoria y jugando un poco con este rico vocabulario ya en desuso, podemos decir que 12 celemines hacían una fanega, por tanto, 6 celemines eran media fanega, también llamada cuarto… además, 5 celemines eran una «hemina » o emina (también la he visto escrita sin h) y 3 celemines eran un cuarto de fanega…

Parece complicado, pero al igual que con el euro, las pesetas, los duros o cualquier medida que se utilice… el uso y la práctica los hacen fáciles y familiares con el tiempo.

Contenedor de un celemín | Fuente: Wikipedia | Licencia Creative Commons

Junto con las Fanegas, los celemines o las arrobas, existía una inmensa colección de medidas como las varas, las varas cuadradas, los cuartos, las cuartillas (sobre todo para vino), la cana, media cana, la peonada, la libra castellana, la tahulla, la aranzada, la labrada, un quintal… en fin, la lista es riquísima en nombres y medidas.

He encontrado algunas páginas muy interesantes con una recopilación (bendita paciencia) de la mayoría de estas medidas y su correspondencia en el sistema métrico… Aquí os dejo unas cuantas que me han servido para realizar este post:

Medidas y correspondencias

Más medidas y correspondencias

– Os dejo además una selección de enlaces a muchas de estas medidas en la Wikipedia, que os animo a curiosear un poco… Aunque hace más de un siglo que fueron sustituidas por el actual sistema metrico, la mayoría aún las podeis escuchar si visitáis de vez en cuando vuestro pueblo o el de vuestros abuelos: La Arroba | La Fanega | La Fanega de puño | Celemín | La Vara | La Hemina | La Cuartilla | El Azumbre | Libra castellana | La Panilla | La Aranzada | El Marjal | El Quintal | La Panilla | La Onza | El Adarme | El Almud