Sí señor, porque al igual que en la religión, lo aconsejable es empezar temprano, cuando aún no tienen las cosas claras y sus ideas todavía no se han formado. Cogerlos desde pequeñitos, abrirles los ojos (y la mente) a «todas las alternativas»…
Porque me imagino que el libro va dedicado a los niños… No he querido ni abrirlo, no he querido ni tocarlo, y sobre todo no he querido ni imaginar que podría ser peor y estar dedicado a adultos con niños que, en el caso de que su hijo esté enfermo opten por este tipo de chorradas en lugar de llevar al crío a un médico o un hospital…
El libro me lo he encontrado en la sección de Medicina de la librería Lemus de La Laguna… y no… no estaba allí por error, o alguien lo había movido de su sitio original entre las pseudociencias para colocarlo entre los libros de Medicina… Nada de eso, lo tenían en la sección de Medicina junto a otros sobre acupuntura, gemoterapia y paparruchapias varias.
Pues nada, hombre… que se te ponga malo el crío y tú lo trates con los consejos homeopáticos del libro en cuestión… Luego no vengas a llorar ni a quejarte.