DOCUMENTALIA – EL EGIPTO DE CLEOPATRA – PARTE 3
Finalizo hoy la serie de 3 post dedicados a Cleopatra, que empezó en una primera entrada repasando sus orígines y familia y que continuó con su etapa «Cesar»…
Retomaremos la historia y recuerdo que habíamos dejado a Cleopatra de vacaciones pagadas por el Nilo con su nuevo protector… Julio.
Sin embargo, el Cesar era un hombre ocupado y no podía estar toda la vida de aquí para allá navegando… Tenía obligaciones, batallas que ofrecer y… ups! una esposa en casa… pillín, pillín…
Pero en fin, eran otros tiempos y la idea de Cesar era, después de haberse convertido en Dictador Vitalicio, casarse con Cleopatra y unir así dos Imperios y controlar todo el Mar Mediterráneo.
Sin embargo cuando nuestra Cleo viajó a Roma, no fue bien recibida por el pueblo romano, que la llamó de todo… y Cesar se contentó con tenerla de concubina y presentar en público a su hijo con la egipcia, que evidentemente se llamó Ptolomeo Cesar… Cesarión para los amigos y que a la postre sería el último faraón de la saga…
Cleopatra estuvo dos veces en Roma. Sin embargo, el segundo viaje se llenó de problemas porque un tal Bruto y unos amiguetes decidieron probar la resistencia del Cesar al acero… con funestas consecuencias… y Cleopatra tuvo que volver a Egipto ya que la cosa estaba bastante revuelta por las tierras itálicas.
La muerte de Cesar desencadenó una lucha de poderes para hacerse con el trono… Tres aspirantes… por un lado Marco Antonio, general de Cesar que supo hacerse con el pueblo tras vengar a su amigo persiguiendo a sus asesinos… Por otro lado Octavio, al que el propio Julio había designado como sucesor… y en tercer lugar, Lépido, otro militar que finalmente terminó apoyando a Antonio.
Y bueno… lo de siempre, primero se intentan hacer las cosas más o menos ordenadas (Triunvirato) y después a pelearse a leche limpia (Guerra Civil).
Foto | Antonio y Cleopatra
(Confirmado lo que decíamos en la Parte 1 de la napia de Cleo)
En todo este revuelo Marco Antonio decide pedir ayuda militar a Cleopatra, que realmente no tenía ni para pipas en aquellos momentos… Cleo no quiere entrar en estas peleillas romanas, pero accede a tener una entrevista con Antonio… ¿Resultado?… Otro paseo por el Nilo, musica sensual de Barry White y otro romance para la portada del Diez Minutos de la época…
Pero al igual que Cesar, los asuntos de Roma son los asuntos de Roma y Marco Antonio tiene que volver a su pesar, para la tierra de la pizza y encima para casarse obligado con Octavia, la hermanita de Octavio… Estamos todavía en la época donde se intentaban arreglar las cosas sin llegar a las manos…
Sin embargo, a Marco Antonio estaba deseando volver a Egipto… y aprovechaba cualquier expedición militar cercana para apuntarse… Que hay guerra contra los Partos… pues contra los partos… y de paso visito a Cleo…
En esta visita, se encuentra con una sorpresa… bueno dos sorpresas: Gemelos… y decide casarse con Cleopatra… oiga! ¿Y que hacemos con Octavia?… Pues seguimos casados… Lo dicho, eran otros tiempos y todavía no estaba en aplicación la Ley Organica de 7 de Julio de 1981.
El triunvirato funcionaba regulín regulan… lo iban prorrogando… pero estaba claro que Octavio quería el poder y Marco Antonio estaba más fuera de festines y revolcones con Cleopatra que atendiendo las necesidades de Roma…
Y llegó lo que tenía que llegar… la guerra civil… y claro, ahora incluyendo a Egipto también.
Los resultados de la guerra… concluyentes… en la batalla de Actio las naves de Octavio derrotaron a las de Cleopatra y Marco Antonio y abrieron de par en par las puertas de Egipto al que sería el primer emperador de Roma:
Don Cayo Julio Cesar Octavio Augusto… (ríete tú de los nombres en los culebrones).
Cleopatra sin embargo, era más chula que un ocho y no quiso que su pueblo la viera derrotada… Así que, vistió sus naves de gala (las que le quedaron después de la somanta), izó los pendones de victoria y regresó a casa como si hubiera vencido…
Al pueblo le duró poco el sueño, porque detrás venía Octavio dando caña y finalmente Cleopatra decidió suicidarse, ante la idea de ser tomada prisionera y exhibida en Roma como trofeo.
Pero Cleopatra era mucho Cleopatra y antes de poner fin a sus días, intentó seducir a Octavio, como ya lo había hecho con Cesar y Antonio… Sin embargo, al ver que el tipejo ni se molestaba en mirarla, decidió marcharse al otro barrio dejándo que un aspid, el símbolo de Egipto, le diera un mordisquito…
Cleopatra VII Filopator, uno de los personajes más interesantes y apasionantes de la Historia.
Y para terminar la Serie, os dejo este gran, gran, gran Documental que nos descubrirá un tesoro perdido en el mar, esperando ser descubierto… El Palacio de Cleopatra
ANTERIORMENTE EN DOCUMENTALIA:
El Egipto de Cleopatra – PARTE 1
El Egipto de Cleopatra – PARTE 2
Documental Via | Danizia